Chile y la Constituyente: ¿camino hacia un Nuevo trato Laboral?
(04.05.2022) El próximo 4 de septiembre, la ciudadanía de nuestro país tendrán que asistir a un hito histórico en nuestra historia republicana, votar en el plebiscito de salida para aprobar o rechazar la propuesta para una nueva Constitución. Diversas organizaciones sindicales han presentado propuestas – alrededor de 5. 614- las que abordaban ‘Principios y Derechos Laborales’, nacidos de discusiones en diversos “Encuentros de Trabajadores y Trabajadoras por un Nuevo Chile”. En esas propuestas se solicitaba la creación de una ‘norma laboral’ para la Nueva Carta Magna que nos regirá para los próximos 30 o 40 años.
A La fecha, se han aprobado varios artículos de carácter laboral, como el numeral 8, que prohíbe cualquier discriminación entre trabajadores y trabajadoras que no se base en competencias laborales o idoneidad personal, así como el despido arbitrario. A lo anterior, se suma un artículo bastante polémico (número 9), el que dice que la participación de asalariados, a través de sus organizaciones sindicales, tienen el derecho de participar en las decisiones de la empresa.
En artículo número 11, lo importante es que se reconoce el trabajo doméstico y de cuidados, que plantea que son labores necesarias e indispensables para sostenibilidad de la vida y el desarrollo de la sociedad. El texto para esta actividad económica indica que contribuye a las cuentas nacionales en la formación y ejecución de las políticas públicas.
Para ello, Oh! Citoyens Live, invitó a la abogada laboralista Claudia Fachinetti, Jefa de la Oficina Laboral de Santiago y Cristian Toledo, Director Regional ANFUC (Asociación Nacional de Funcionarios de la Corporación de Asistencia Judicial de la Región del Maule), para conocer el detalle de estas propuestas constituyentes.
Respecto de la libertad sindical, que incluye los derechos a la sindicalización, negociación colectiva y derecho a huelga, Fachinetti, precisa que en la actualidad, cuando se produce una contratación, “trabajadoras y trabajadores no tienen ninguna posibilidad de negociar”, y es lo que la mayoría del mundo laboral vive con la actual constitución y “donde la herramienta más potente es la huelga”, mayormente circunscrito solo a la realidad específica de la empresa.
Toledo, agrega que, incluir la libertad sindical implica “consagrar este derecho en la actual discusión como un tremendo avance laboral”, y que incluye – además – a los empleados públicos. En la actualidad, este sector negocia solo a través de la CUT o la ANEF “a la buena voluntad de las partes”, dijo el dirigente maulino.
En el escenario estatal, queda pendiente abordar y definir la calidad de empleado, es decir, si éste posee pertenencia como funcionario de planta, contrata y especialmente honorario con igualdad de derechos laborales. El pleno de la Convención sigue discutiendo este tema – que se ha devuelto a la Comisión del Trabajo – dada la urgencia de redactar un articulado que refleje de mejor manera la precarización y tercerización del trabajo, señaló Fachinetti.
El caso del trabajador a honorario – recuerda Toledo – tiene una data centenaria en la historia del Estado, específicamente, el mayor número se ubica en las municipalidades. “Son cargos de confianza que tienen una temporalidad específica”, clarificó Toledo, aunque cumplen muchas veces labores profesionales al igual que las otras categorías de contratación, indicó.
Para la abogada jefa de la Oficina Laboral de Santiago, la esencia de lo que se está discutiendo en el seno de la Constituyente, en materia laboral, “es la libertad sindical”, ya que la actual carta no permite la asociatividad por ejemplo, a nivel ramal, y que “es un instrumento para la mejor redistribución del ingreso”, y que implica un gran cambio cultural, a nivel de la dirigencia sindical y de la masa asalariada.
En las imágenes de los medios, se ha visto algo novedoso respecto a una nueva relación entre dirigentes de la CUT y el Gobierno, lo que podría tener buenas señales, especialmente porque en la discusión constituyente se enuncia que solo se podrá negociar a futuro a través de sindicatos, otorgándole un respaldo a la ‘tituralidad sindical’, pero – agrega el dirigente – “me gustaría ver como se termina (esta relación) de buen ánimo hacia adelante”. Para la abogada Fachinetti, este nuevo trato entre el Gobierno y la central unitaria es muy positivo, para que “tenga voz y que pueda habla a nombre de los trabajadores (…) y después de 6 años ambos se sientan a negociar el sueldo mínimo”, expresó.
En lo que se refiere a la propuesta de las 40 horas, Fachinetti, recordó que, en estudios realizados sobre nuestro país, Chile se mira como un territorio con baja productividad y muchas horas laborales, a diferencia de países de OCDE. Esto implicaría, un respaldo legal, y “una ganancia por todas partes”, con más tiempo para el ocio y la familia. Por ello, el trabajo constituyente se observa como “un gran avance para las trabajadores y trabajadores”, argumentó.
Ver entrevista completa en:
https://youtu.be/z10IeErHav0